Cadiwoman
Si deseas reservar mesa, deberás llamar por teléfono 7 días antes, a partir de las 18:00h, al numero 915347557/58, hasta que queden mesas disponibles.
Serán mujeres fuertes, independientes, que toman decisiones solas, que respetan la naturaleza, "un rollo celta tipo 'Xena, la princesa guerrera', pero sin estar buenas", así describen el tipo Susana Ginesta y Tatiana Sánchez, de la chirigota callejera 'Cadiwoman'. A ellas y al resto de las doce componentes que integran esta reconocida agrupación callejera les gusta comer, beber, tocarse y quieren representar una feminidad diferente a la establecida "tipo 'Braveheart' pero con más pelo y alegría". De esta forma se despiden de 'Las Talegueras' (2016) más canis y chungas, tras un año de descanso con 'La Antotología', "con la que no creamos nada nuevo", para regresar con 'Las guerreras de la tribu del tótem gordo'.
Llegan con la intención de dar guerra, pero en clave de humor, del absurdo, del gamberro, del bizarro, pero sobre todo del feminista y social, desde el punto de vista de unas mujeres sensibles que defienden que todavía falta igualdad real entre hombres y mujeres, por eso argumentan que todo el mundo debería ser feminista porque no es más que una manera de reivindicar justicia social . " Nos metemos con las 'marichuladas' que respiramos todos los días, ridiculizamos al patriarcado, pero nunca en contra de los hombres porque eso no es feminismo, porque los hombres sí que nos gustan, algunos más que otros", bromean.
En sus letras tratan de normalizar el mensaje feminista, de provocar el debate, fomentar la reflexión y además son graciosas. Por eso se encuentran con reacciones del público de todo tipo, la mayoría de cariño, algún ceño fruncido pero sobre todo no dejando indiferente a nadie. "Es un objetivo del que no nos damos cuenta y lo estamos consiguiendo, que es hacer pensar sin atacar a nadie", plantea Tatiana. "Partimos riéndonos de nosotras mismas y no ridiculizando a nadie. Parodiamos los roles de géneros que tenemos asumidos todos y todas, y una serie de comportamientos que nos encorsetan desde el humor".
Una forma diferente de la que se está viviendo en el COAC 2018, donde apoyan la labor de 'Carnaval feminista' que utiliza las redes sociales para fiscalizar las letras y agrupaciones con connotaciones sexistas y machistas. Hay gente que habla de censura, ellas hablan de evolución. "De la misma forma que cada vez hay más presencia femenina en el concurso, hay más hombres feministas que piensan como nosotras. Ahora mismo hay gente que no se plantearía hacer determinados chistes racistas porque hemos tenido una evolución que pasa en todos los sectores sociales. Sin embargo, hay reticencia a cambiar en materia de igualdad porque parece que no es tan necesario", explica Ginesta.
Apertura de puertasa a las 00:00h.